Super Amara Bera Bera ha presentado las renovaciones de las capitanas Alba Menéndez y Esther Arrojeria y en palabras de Tati Garmendia, “contentas que el corazón del equipo sigan, dos jugadoras carismáticas y de casa”.
Alba Menéndez cumplirá así la 14ª temporada. A su juicio, “es una suerte poder estar en el club de casa, que además es competitivo, luchamos por títulos y estoy contenta” ha comentado para apuntar que “no me veo en otro sitio que no sea éste ahora mismo”, porque “me siento importante, tenemos esa competencia sana entre compañeras que te hace crecer y todas queremos más minutos pero para ello tenemos que competir con las compañeras”. La capitana ha desvelado que cerró el acuerdo en “una reunión y media” y que “seguiremos luchando por todos los objetivos el año que viene”. Preguntada por la igualdad de la competición, Menéndez ha asentido: “año tras año se ve que la Liga es más competitiva, antes ganábamos tripletes y ahora es más difícil”. Sobre la temporada venidera, entiende que “nosotras también nos hemos reforzado, los objetivos siguen siendo los mismo, pelear por todos los títulos y dar un paso más en Europa”.
Por su parte, Esther Arrojeria considera que es “un privilegio estar aquí, estoy muy contenta, es el equipo de casa, es una suerte tener un equipo del calibre de Bera Bera al lado de casa, poder estar con la familia, con los amigos y competir en la elite”. “De momento Bera Bera me ofrece todo a nivel deportivo y personal y estoy donde quiero estar” ha añadido.
A su juicio es “bonito y muy importante seguir contando con la gente de casa, el balonmano tiene que seguir creciendo, los y las jóvenes que vienen tienen que tener referentes vascas, que con esfuerzo y sacrificio vean que se puede llegar a la elite”. Preguntada por si cada vez más difícil reeditar los títulos, Arrojeria ha apuntado que “siempre es difícil, el nivel está subiendo, se nos resisten Copas y Supercopas y cada título se tiene que luchar más, de modo que se valoran más”. En este sentido, entiende importante “mantener gran parte del bloque”. Sobre su temporada, que le ha llevado a ser convocada por las Guerreras para los Juegos del Mediterráneo, “me he sentido bastante bien, he recuperado varias facetas que tenía en el olvido, me he sentido más cómoda en el uno contra uno, en el lanzamiento a media distancia que hacía tiempo no utilizaba”. Arrojeria entiende la llamada de Prades como “un premio al trabajo realizado a estos años. Me hace mucha ilusión, es una experiencia nueva. En la última vez me lesioné –ligamento cruzado- en el entrenamiento y es una manera de quintarme una espinita”.