Gorka Núñez: "Los datos dicen que llegamos en el mejor momento"
Entrevista al preparador físico de Super Amara Bera Bera, Gorka Núñez, para valorar sus primeros cinco meses de trabajo con el equipo.
P.- ¿Cómo se afronta un parón en la competición de casi dos meses? Y con tres jugadoras con presencia desigual en el Europeo de Suecia
R.- En condiciones normales, un parón de estas características es idóneo. Los deportes de equipo se caracterizan por tener que competir cada semana, y a veces dos veces por semana. El hecho de tener que competir con garantías todas las semanas, y que todos los sábados tengan que ser tu mejor día, hace muy difícil poder entrenar con el impacto suficiente para generar grandes adaptaciones. Hay que recuperar del partido jugado, entrenar y recuperar para el próximo partido. Apenas hay oportunidades para entrenar fuerte y conseguir grandes mejoras, porque no puedes permitirte el lujo de llegar fatigado a competir. Así, estos periodos sin competición, te permiten, contrariamente a lo que a veces se piensa, poder entrenar con mucha intensidad y densidad, pues no hay problema en que las jugadoras estén varias semanas acumulando entrenamientos y fatiga. Es en estos parones cuando de verdad se puede mejorar sustancialmente la condición física.
Pero como dices, no podemos decir que haya sido un parón perfecto. Además del Europeo, en el que tres jugadoras importantes salen de la dinámica del grupo, hay compromisos que perturban mucho lo que podemos considerar un calendario ideal. Son eventualidades que hay que respetar y apoyar, por lo que aportan a la difusión del balonmano, pero hemos tenido una semana a las jugadoras concentradas con las selecciones autonómicas en un momento importante del ciclo, esta semana jugaremos sábado y domingo la Copa de Euskadi, lo que condiciona mucho los entrenamientos de anteriores y posteriores al torneo, a siete días del partido contra Rocasa, lo cual se añade a la dificultad propia de estas fechas, con muchos días de parón obligado... Pero creo que estamos gestionando bien todos estos factores, las jugadoras no tienen problema en hacer sesiones extras, muchas veces fuera de los horarios habituales... En ese sentido, tener un grupo con este nivel de compromiso facilita mucho las cosas.
P.- ¿Cómo llega el equipo a un mes clave en la competición?
R.- Enseguida lo veremos, porque es la competición la que te pone en tu lugar, pero en principio, los datos que tomamos en los entrenamientos nos dicen que seguimos creciendo. Estamos tratando de potenciar nuestras fortalezas y mejorar en aquellos aspectos en los que consideramos que flaqueamos más. Como te digo, los números nos dicen que probablemente en este mes estemos a nuestro mejor nivel desde que empezamos a entrenar en verano. Y desde ahí, seguir creciendo.
P.- ¿Qué valoración haces de tu trabajo desde el mes de agosto? ¿Se han cumplido los objetivos marcados? ¿Cómo ha respondido el grupo?
R.- Aún estamos adaptándonos respectivamente. No es una buena idea cambiar drásticamente la dinámica de un grupo, pero sí estamos metiendo algunas metodologías y sistemáticas diferentes que hay que introducir progresivamente para que no produzcan el efecto contrario al deseado. Nos vamos conociendo, marcando objetivos y, por ahora, vamos cumpliéndolos. Mi balance a nivel personal es muy bueno, estoy disfrutando de la experiencia, aprendiendo mucho e intentando aportar en lo que pueda. En cuanto a los objetivos, vamos marcando objetivos a corto plazo, tanto a nivel de condición física como de composición corporal. Por ahora, vamos cumpliendo los objetivos propuestos, lo cual siempre es bueno para la motivación del grupo y para seguir trabajando con intensidad sin relajarse.
P.- ¿Qué es lo que más te ha sorprendido del grupo?
No diría sorprenderme, pero lo que más me ha gustado es la capacidad de entrenamiento y el compromiso. Jugadoras que, además de entrenar todos los días y muchas veces 2 veces al día, estudian en la universidad, algunas trabajan... y nunca fallan. Cuando por horarios existe incompatibilidad, la disponibilidad para hacer sesiones extras individuales es total. Cuando una jugadora está de acuerdo en que necesita un poco más para estar a su mejor nivel, simplemente se pone a disposición de los técnicos y lo hace. No sólo a nivel de entrenamiento, también a nivel nutricional. Esto no diría que es excepcional, pero también es cierto que hay otros lugares en los que no se da, y es algo digno de poner en valor, pues así es como los grupos crecen: desde el ejemplo y el compromiso individual con el grupo. Hay una frase que me gusta mucho y es: "El halago discrimina el talento. Si te hace confiarte y relajarte no tienes el talento suficiente. Si te responsabiliza, entonces sí eres diferente". Tenemos un grupo de jugadoras y entrenadoras a las que el halago responsabiliza y provoca que quieran trabajar más y mejor. Y ese es un valor fundamental.
P.- Salvo la lesión de Ana Martínez y los problemas en el gemelo de Elorza, a pesar de tener una amplia carga de partidos, el trimestre competitivo se ha caracterizado por la ausencia de lesiones…
R.- Sí. Si algo tiene bueno este club, es que todo el mundo conoce su rol y se puede trabajar sin cortapisas. La directiva deja trabajar con libertad y paciencia, y eso es absolutamente fundamental. Además, las entrenadoras han sido jugadoras de alto nivel y conocen mejor que nadie la necesidad de controlar las cargas. Dejan hacer y además de realizar muy bien su trabajo, colaboran con el mío, que es el nuestro. De esta manera el proceso de entrenamiento está mucho más controlado. Cuando puedes controlar las cargas de trabajo, hay tiempo y compromiso para el trabajo preventivo, y se estructuran y se respetan las pautas de entrenamiento y recuperación, es mucho más sencillo disminuir el riesgo de lesión. Es importantísimo conocer los factores que predisponen a la lesión y controlarlos. Además, saber cuándo te puedes permitir estar fatigada y cuándo no. Hay mucho trabajo de fuerza, preventivo, propioceptivo y técnico detrás. Esta ha sido una prioridad y, por ahora, está yendo muy bien. La lesión de Ana fue un accidente que no puedes controlar, y en el caso de Patri, probablemente tuvimos que ser menos agresivos en algunos aspectos, y ante la duda, haber parado a la jugadora. Recuerdo que la misma mañana del día en el que por la tarde se hizo daño, hablamos precisamente sobre ello. Es posible que haya sido el único error que hayamos cometido en ese sentido este año. Siempre se debe aprender de estos contratiempos. Patricia ya está entrenando con normalidad, y Ana está trabajando para volver más fuerte que nunca. Veremos una Ana Martinez mejor y sorprendente cuando regrese, no tengo ninguna duda.
Al llegar me sorprendió la alta incidencia de algunas lesiones en este deporte, como la de LCA, y por ello, el trabajo preventivo y de fortalecimiento ha sido prioritario. El poder entrenar es la clave para mejorar, y para ello es básico tener a las jugadoras sanas. Con la implicación que están teniendo las chicas, y la filosofía del club de dejar trabajar y respetar la labor de cada técnico, me sorprendería que tuviéramos problemas importantes en ese sentido. Gran parte de las lesiones deportivas, salvo los accidentes, son evitables en cierta medida. En ello estamos.
P.- Super Amara Bera Bera es puntera en la liga española pero Europa está en un escalón superior. ¿Crees que Super Amara Bera Bera tiene capacidad para alcanzar mayores cotas en Europa?
R.- Sin ninguna duda. Yo lo creo y las jugadoras y entrenadoras lo saben. Actualmente nuestro nivel de condición física (que es de lo que yo puedo hablar) es suficiente para poder competir con las mejores en la Liga Loterías. Pero conocemos nuestras fortalezas y puntos débiles. Hay muchos aspectos en los que el margen de progresión es enorme. Para poder competir al más alto nivel en Europa, además de otras cosas, se necesita mejorar en algunos aspectos de la condición física. Pero sabemos cuáles son, porque lo medimos, y ya estamos trabajando en esa dirección. Este es un equipo joven, y que, contrariamente a lo que puede parecer, tiene un margen de mejora física muy grande. Pero muy grande. Con método, compromiso y paciencia, podemos mejorar aún muchísimo. Tenemos esos tres ingredientes, además de la ilusión por hacerlo. Por último, tenemos un grupo de jugadoras que comprenden el proceso de entrenamiento. Son muy capaces de sacrificarse con perspectiva - aunque a veces me odien un poco - pues conocen la dinámica de la adaptación y la ruta hacia la mejora. Así que, resumiendo, nos falta camino por recorrer, pero lo recorreremos. Seguro.
P.- Tras el Europeo de Suecia, Jorge Dueñas apuntó al poderío físico como una de las claves. ¿Qué reflexión te merece?
R.- Pues creo que tiene razón. La condición física simplemente te permite ejecutar las acciones propias del juego, más rápido, con más potencia, más fuerte, más alto, y más veces a la máxima intensidad. Todo ello sin que la fatiga afecte a la ejecución técnica y a la capacidad de tomar decisiones. Así que sí, pienso que en este deporte el factor físico es fundamental. Eso y tener unas entrenadoras, como es nuestro caso, que entienden nuestras fortalezas y hacen al equipo jugar de forma que pueda exprimir sus puntos fuertes.
Creo que ahora están en una ventana de oportunidad. Comienza un ciclo olímpico y, en 4 años, hay tiempo para hacer, primero, una buena selección del talento, sin miedo ni prejuicios, y después, construir planes individuales de entrenamiento, nutrición y suplementación, con un seguimiento objetivo específico, para conseguir en estos 4 años una evolución física de las jugadoras que les permita estar atléticamente a la altura de las mejores, y poder dominar también desde el físico los partidos. Esto no es ciencia ficción. Sólo ciencia.