Super Amara Bera Bera ha quedado emparejado con el Brest Bretagne Handball en la ronda 3 de la EHF según ha deparado el sorteo celebrado esta mañana en la sede de la federación europea de Viena. 24 equipos buscaban rival para afrontar esta última eliminatoria en el mes de noviembre que dará acceso a la fase de grupos de la EHF que comenzará en enero de 2017.
Divididos en dos grupos de 12, las guipuzcoanas tenían enfrente a equipos de las ligas más potentes de Europa: Francia, Alemania, Noruega, Dinamarca, Hungría y Rusia. La penúltima bola ha salida la de Super Amara Bera Bera, de modo que la ida se jugará en Donostia previsiblemente el sábado, 12 de noviembre, y la vuelta en Brest el 19 o 20 de noviembre.
A pesar de debutar este año en competición europea dada su logro en adjudicarse la Copa de Francia siendo un equipo de la segunda división, cuenta en sus filas a numerosas jugadoras las internacionales. Eso es lo que ha destacado la entrenadora Montse Puche que ha definido al Brest como “un equipo muy fuerte que pretende hacer algo grande en EHF”.
BREST BRETAGNE HANDBALL Por Nagore Odriozola
El conjunto francés está cosechando ahora los frutos de un proyecto que comenzó pocos años atrás. La temporada pasada consiguieron ascender a la LFH (Ligue Féminine de Handball), máxima categoría de Francia, y esta campaña ha conseguido, con la incorporación de jugadoras de renombre, construir una escuadra muy potente y equilibrada.
De ahí que sea uno de los equipos favoritos a convertirse en uno de los grandes. El caso recuerda mucho al también francés Fleury Loiret Handball, que vivió estas últimas temporadas los ‘años dorados’ de la historia del club. Precisamente es del Fleury de donde llegó el primer gran fichaje del Brest para la temporada pasada, la española Marta Mangué, sobradamente conocida en todo el mundo y una de las históricas tanto en España como en el panorama internacional. “Marta Mangué es una de las piezas fundamentales, no sólo de este Brest, sino de cualquier equipo en el que esté. Es una jugadora muy versátil, muy polivalente. Sabe jugar en cualquier puesto de la primera línea y sobre todo, lo que es muy destacable de ella es que sabe sacar rendimiento a cualquier jugadora que tenga a su lado. Sabe compenetrarse muy bien y adaptar su juego a cualquier situación, movimiento, etc. Encima sabe defender, es una jugadora muy completa y ahora, aparte de su talento innato se le suma toda la experiencia que tiene, por lo que es una jugadora 10”, analiza a su compañera de selección Ana Isabel Martínez.
A todo un estandarte como Marta Mangué, hay que sumarle otro nombre más: Allison Pineau. Si Mangué es el símbolo de la selección española, Pineau es su homónima francesa. A sus 26 años, la jugadora francesa es el motor de la selección de Francia y cuenta con un palmarés envidiable (Medalla de plata en los JJOO de Rio y en los Campeonatos del Mundo de 2009 y 2011, además de ser elegida Mejor Jugadora del Mundo en el año 2009 y haber conquistado trofeos con sus respectivos clubes tanto en Francia como en Macedonia y en Rumanía). A Allison Pineau no hay que descubrirla, es una jugadora de primerísimo nivel mundial y es, junto a Marta Mangué el arma más poderosa que presenta el equipo galo.
Además y por si fuera poco, el Brest ha fichado este año a la lateral derecho internacional rumana Melinda Geiger, procedente del Baia Mare. Es zurda, tiene mucha potencia de lanzamiento y le sobra experiencia. Es una de las jugadoras más importantes de la selección de Rumanía, la cual recordemos es actual medalla de bronce en el Campeonato del Mundo de 2015.
A todas ellas, hay que sumarle la guardameta internacional Cléopatre Darleux, quien hace poco conseguía hacerse viral por un gol que marcó en un amistoso frente a Noruega. Quedando esto último como anécdota, Darleux cuenta en su palmarés con dos medallas de plata de los Campeonatos del Mundo de 2009 y 2011, y fue elegida mejor guardameta de Francia de la temporada 2011-2012. Debido a una lesión de rodilla ha faltado a las últimas citas importantes con ‘les bleues’, pero parece que ya está de vuelta.
No sólo son cuatro nombres, el Brest es poderío, son galones, es potencia física y es calidad. No es uno de los mejores equipos del panorama internacional, pero sin duda es un hueso muy duro de roer con muchas papeletas de hacer algo grande esta temporada tanto en su liga doméstica como en competición europea.
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