inalizó la temporada en la pista para Eider Lizarbe. En un entrenamiento con el división de honor, en una jugada habitual, sufrió una de las lesiones más temidas por un deportista, la denominada triada, la rotura del ligamento cruzado anterior, del lateral interno y lesión en el menisco en su rodilla izquierda.
La jugadora, de categoría juvenil, está incluida en el itinerario de penetración al equipo de División de Honor. De hecho realizó en agosto la pretemporada junto a la plantilla que dirige Imanol Álvarez y durante este parón, motivado por el Mundial de Serbia, iba a entrenar y jugar los amistosos con el primer equipo.
Tras la operación, el siguiente reto de Eider será la recuperación y la pretemporada del año que viene.
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