Bera Bera

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La derrota por 31 a 32 del Akaba Bera contra el Rostov-Don en Bidebieta obliga al equipo donostiarra a vencer en Rusia para lograr el pase a los octavos de final de la Copa EHF. Las jugadoras del Bera Bera han sido presas de sus propios errores, con innumerables e incomprensibles pérdidas de balón que permitían a las de Rostov contar con numerosas posesiones. Afortunadamente, la defensa abierta planteada por Reyes Karrere en el último tercio del partido permitió a las vascas igualar el partido. El inicio del partido ya marcó lo que iba a ser el discurrir del mismo, con el equipo ruso basando sus acciones ofensivas en sus altísimas laterales, que superaban los 190 cms., y en las efectivas finalizaciones de las menudas extremos. Ambos equipos plantearon de inicio una defensa 6-0, si bien en ninguno de los dos lados contaba con la suficiente contundencia, y el marcador engordaba indicando que el partido sería con muchos goles. El poder ofensivo de las visitantes impuso una diferencia de 2-3 goles que mantuvieron con solvencia, y tan solo los arranques de coraje, la buena dirección de Tati Garmendia, y la efectividad de Matxalen Ziarsolo evitaron que la diferencia se ampliase. Al descanso, el marcador reflejaba un inquietante 17 a 20, evidencia de las carencias ofensivas de ambos conjuntos. En la reanudación del partido, más de lo mismo, la facilidad de lanzamiento de Adzhiderskaya superaba una y otra vez a la defensa local, y la hábil extremo internacional Uskova sacaba beneficio de las acciones de ésta. Sin embargo, mediado este período la entrenadora local, Reyes Karrere buscó alternativas a la falta de ideas del equipo, que dependía sobremanera de los lanzamientos de Sanromán, y planteó una defensa más abierta, con Verónica Valverde haciendo un avanzado muy profundo para evitar la circulación de balón y marcando de cerca a las lanzadoras, defensa 3-2-1 que dio grandes réditos al equipo local, pues permitió numerosas recuperaciones de balón e igualar el partido. Junto a este cambio, también resultó muy acertada la sustitución ordenada en la portería, ya que Patri Aisa sustituyó con efectividad a Johanna Bouveret. Tan solo a falta de dos minutos para la conclusión lograron las locales igualar el partido, a 30 goles, y se mantenía la incertidumbre del resultado final. Con ventaja de las visitantes por un gol, el Akaba Bera Bera tuvo oportunidad de viajar a Rusia con el empate, pero Sanromán marró un lanzamiento de siete metros con el tiempo concluido. La victoria del Rostov-Don, merecida, deja pese a todo en el aire el resultado de la eliminatoria, ya que las donostiarras han demostrado que, de no cometer tantos errores, podrán recuperar la diferencia mínima lograda por las rusas a domicilio. El próximo miércoles el Akaba Bera Bera visitará León para enfrentarse al Cleba en partido correspondiente a la octava jornada de la Superliga ABF, y la apretada agenda del equipo se completará con el viaje a Rostov, el próximo viernes para completar la eliminatoria de la Copa EHF.

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