Una inoportuna lesión en el hombro producida el año pasado en un partido de la selección española en Italia, le impidió jugar, entre otros, el partido ante su exequipo el Elche Mustang en Bidebieta. De cara al choque del próximo sábado 1 de noviembre –a las 12 horas dado que al ser festivo la instalación cierra por la tarde-, Ana Martínez tiene “muchas ganas de jugar el partido y de salir a por todas desde el principio para evitar sustos como el del año pasado”. Porque las ilicitanas se adelantaron 2-10 y Bera Bera tuvo que reclamar la mejor versión de Eli Pinedo -12 goles- para ganar 21-20.
Escucha a Ana Martínez
Con importantes molestias en la rodilla Ana Martínez, en comunión con Aitor Etxaburu, decidió parar y someterse a una rehabilitación. Transcurrido algo más de un mes se reintegró al grupo y debutó en liga en Bidebieta ante Alcobendas. “Estoy en proceso de coger ritmo, con la fisio estamos gestionando la rodilla y va mucho mejor”. De todas formas, todos los días Ana Martínez tiene su particular trabajo “lunes, miércoles y viernes, prevención con fortalecimiento de cuádriceps y martes y jueves con la fisioterapeuta –Nerea Uranga estiramientos, tratamiento con hielo, con calor”. “El entrenador confió en mí en Valencia y la rodilla me permitió disfrutar un montón” explica la reconvertida central.
Sobre la posición en la que la ubica Etxaburu, asume “el reto a pesar de no haber jugado mucho ahí, salvo algo en la selección”.
Sobre su exequipo, que ha incorporado a Nitsan Dunay y a jugadoras importantes del Mar Alicante como Marizza Faria o Lene Tobiasen, Ana Martínez sigue viendo la mano del entrenador José Ignacio Prades porque “sigue plasmando la identidad del Elche, que es luchar, luchar y luchar”.
A pesar de que el equipo “ha cambiado mucho y que ha habido resultados que no han acompañado” Ana Martínez cree que “es una plantilla con gran calidad, que mezclar veteranía con juventud”, de modo que advierte que “hay que salir desde el minuto cero a ganar”.
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